
01 de Enero de 2011
Por Humberto Marte
12 años educando en Internet
Aunque les parezca increíble a quienes creen conocerme, nunca he blasfemado ni cuestionado la voluntad de Dios, aunque he peleado ferozmente con los que con la biblia y la religión se aprovechan de la inocencia y engañan a los pueblos con ofertas de salvación, cuando ellos tienen gran culpa de la desigualdad que existe
Leia have poco el enojo de un abogadito que repite como cotorra un programa estancado en su cerebro desafiando a Dios, porque según el, Dios es el culpable de que una joven padezca de cáncer, lo extraño es que a la vez el abogadito convocaba a los incautos como el, a exigirle a Dios que sane a esa joven, pedido que fue respondido por muchos
Si ese abogadito antes de exhalar la blasfemia revisa su entorno, y es creyente de que Dios enferma y sana, verá que tiene mucho por dar las gracias, por ejemplo su madre que pasa de los 75 años y es una mujer lucida mas inteligente que el
Me pregunto muchas veces como es que se le otorga un titulo a una persona que no es capaz de saber ni enseñar, que dentro de los defectos que arrastramos, las enfermedades forman parte de la imperfección que nos condena, que el ser humano desde la misma concesión antes de que el esperma se convierta en embrión ya tiene programada la enfermedad, y que esta se desarrolla en cualquier momento lo mismo al año como a los 32 o a los 80,
El error es de aquellos que utilizan el nombre de Dios para todo, queremos responsabilizarlo de su deseo, y aporte, desde cuando somos pobres, hasta cuando robamos para hacernos ricos, hay mucho por hacer para que no sea Dios o el culpable o el mediador de lo bueno y lo malo, ----si en la mesa del prójimo falta el pan ----
¿por qué pedírselo a Dios si al que le sobra puede aportarlo?
¿Por qué pedirle a Dios que haya paz si quien inicia el conflicto es el mismo hombre?
¿Acaso no puede el hombre meditar y reconocer cuando abusa y cuando ha cometido un crimen?
El hombre tiene una capacidad inmensa pero la gula del poder lo atolondra, si el hombre no fuera egoísta con su misma esencia, lo que le rodea alcanzara para que no haya tanta diferencia y así le quitáramos la carga a Dios, porque, si se cree que el da la enfermedad, también se puede creer que da la cura, pero quienes tienen en sus manos el proporcionar un respiro lucran con su conocimiento y la medicina no alcanza para quienes también son hijos de Dios.
Los hipócritas utilizan a Dios para aventurar, convocan a la oración con dos propósitos, si con la ayuda de la medicina el enfermo se mejora, dicen que su oración fue escuchada y con eso aumentan sus ganancias y su ego, si ya la medicina no puede hacer nada callan como cobardes hasta que halla otra victima,
Busquemos ser honestos y admitir que gran parte de los defectos que poseemos son de nuestra responsabilidad, Dios es el creador pero quien have posible lo injusto, lo inmoral, lo perverso, el crimen, el odio, la arrogancia, la mentira, la falsedad, la hipocresía, la envidia, el egoísmo, -----quien deja que muera su prójimo sino tiene dinero para curarse, quien discrimina a su especie por su color o su insolvencia, quien maldice cuando es impotente, o bendice cuando es correspondido, es el hombre si todo esto se echara a un la estaríamos ayudando a Dios, pero quien se atreve a dar el primer paso, hipócritas todos. Sss Humberto Marte quiero volver a nacer
0 Comentarios:
Post a Comment